Éstos son los métodos de quienes han venido a robarnos la sanidad.El Pablo Remacha tenía un mamógrafo. Se lo llevaron por la fuerza, pero por el día.
Ahora les tocaba entrar a por los ecógrafos. Y se encuentran con una manifestación de miles de personas. Miles de personas que se saben víctimas de los recortes en sanidad.
Como dijo Brecht, hay muchas formas de matar. Los recortes en sanidad, sin duda, matan. Que hubiera listas de espera de 7 meses y que, encima se lleven esos ecógrafos (cuando lo que pasaba es que hacían falta más), es una nada sutil forma de matar.
Las personas que se atreven a matar suelen hacerlo con nocturnidad y alevosía. Cuando no les ve nadie. Claro que también intentan no dejar pruebas. Básicamente porque si dejan pruebas evidencian que son culpables. Pues eso: Rudi y Oliván son unos asesinos y además han evidenciado, con esta puerta forzada y rota, que lo son.
Vamos, que la han cagado.
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